¿Alguna vez te has planteado viajar a Noruega?
Si eres un amante de la naturaleza y los paisajes sobrecogedores, seguro que Noruega está en tu listado de destinos pendientes. Si no es así, sigue leyendo este artículo para descubrir algunos espacios naturales que te dejarán sin aliento.
A continuación te doy 7 razones para que no te lo pienses más y empieces a buscar fechas en el calendario para viajar al país de los fiordos...y de mucho más.
1 - Fiordos Noruegos:
Son la carta de presentación del país. Estas obras de arte esculpidas por la naturaleza se crearon tras la inundación de los valles formados por la acción de los glaciares cuándo éstos se retiraron. Aunque a primera vista puedan parecer grandes lagos, los fiordos contienen agua salada del mar, pero también consiguen grandes aportes de agua dulce a través de ríos y espectaculares cascadas que se precipitan por sus escarpadas paredes rocosas.
¿Os imagináis comiendo al lado de un fiordo disfrutando de paisajes como éste? En Noruega es posible, ya que existen decenas de áreas de servicio totalmente equipadas con mesas, barbacoas y baños impolutos con agua caliente y calefacción. Eso sí, en estos casos el menú corre por nuestra cuenta. ¡Buen provecho!
Noruega es el país que cuenta con el mayor número de fiordos del mundo, siendo algunos de los más conocidos el Nærøyfjord, el Sognefjord, el Lysefjord y el Geirangerfjord, pero existen más de 1000 fiordos que se extienden a lo largo de 4000 kilómetros, principalmente en su costa occidental.
2 - Seguir la pista a los Vikingos:
Desde monumentos conmemorativos como las espadas gigantes de Sverd i fjell...
...hasta las sorprendentes iglesias vikingas que encontraremos diseminadas por todo el país.
La historia y cultura vikinga es realmente interesante, así que no podemos olvidarnos de hacer una parada en el Museo de los barcos Vikingos de Oslo para conocer de primera mano cómo eran las embarcaciones con las que este pequeño pueblo escandinavo atemorizó durante más de 3 siglos a algunas de las poderosas potencias del norte de Europa a lo largo de la Edad Media.
3 - Alojarse en una cabaña de madera en mitad de la naturaleza:
Los idílicos paisajes de Noruega te incitan a disfrutarlos las 24 horas del día, por lo que alojarse en una cabaña de madera a orillas de un fiordo y rodeado por cascadas de varios centenares de metros te permitirá acostarte y despertar en plena naturaleza.
Si eres más aventurero estás de suerte, ya que en este país está permitida la acampada libre, lo que te permitirá disfrutar más aún de su entorno y alojarte en hoteles de un millón de estrellas.
4 - Caminar sobre un glaciar:
Entre la innumerable variedad de actividades que se pueden realizar en la naturaleza, caminar sobre un glaciar es algo que lamentablemente cada vez se puede experimentar en menos lugares.
En Noruega existen varios glaciares en los que todavía se puede practicar esta actividad, así que os animo a vivir la experiencia de caminar por el hielo y hacer una ruta sobre estas gigantescas lenguas heladas que incluso aquí, cada vez corren mayor peligro de desaparecer por culpa del cambio climático.
5 - Naturaleza desbordante:
Lagos, montañas, cascadas, bosques infinitos, islas, acantilados, el sol de medianoche o las auroras boreales es lo que Noruega está deseando compartir con todos vosotros.
Allá dónde mires encontrarás algo que llame tu atención. Valles que parecen sacados de algún sueño...
...imponentes cascadas situadas a escasos metros de la carretera...
...y otras que parecen querer inundarlo todo con sus espectaculares saltos de agua.
Y es que el agua es la gran protagonista de Noruega. Allí se puede contemplar perfectamente el ciclo del agua en su máximo esplendor y entender cómo un elemento a priori tan delicado, es capaz de moldear montañas y erosionar valles a su antojo.
Desde las cumbres nevadas donde el hielo se acaba compactando para formar los glaciares hasta las cascadas que vierten sus aguas en los fiordos. Desde las amenazantes nubes formadas por la evaporación de estas aguas y que siempre pueblan el cielo noruego, hasta la lluvia regeneradora que permite la existencia de unos bosques infinitos y praderas de un verde intenso que son mudos testigos de este ciclo que día tras día, año tras año y siglo tras siglo han moldeado un mundo de fantasía.
6 - Infinitas rutas de senderismo:
Con la extensión del país y la variedad de paisajes que nos encontramos en Noruega, os podéis hacer una idea de que las rutas de senderismo que tenemos a nuestra disposición son prácticamente infinitas.
Existen infinidad de senderos fáciles de explorar que nos conducen hasta lugares tan conocidos como el Púlpito...
...en los que no sólo el final del recorrido te dejará sin respiración, sino que a lo largo del sendero también encontrarás paisajes que te harán empequeñecer en el mundo de los trolls y los gigantes mitológicos.
Otras rutas te llevarán a descubrir la Noruega más salvaje e indómita escalando montañas, viajando a los confines del continente por encima del círculo polar ártico o aventurándote a contemplar el lago Ringedalsvatnet sobre la lengua petrificada de un troll situada a 700 metros de altura.
Hay rutas de senderismo y en bicicleta que os adentrarán en algunos de los paisajes más espectaculares del planeta, algunas de ellas os llevarán por estrechas gargantas...
...y otras discurrirán por amplios valles glaciares cubiertos de vegetación y rodeados por cascadas y montañas nevadas que configuran un paisaje que impresiona, sobrecoge y maravilla a partes iguales.
Como habéis visto, hay rutas para todo el mundo y con diferentes grados de dificultad, pero todas ellas tienen un denominador común: te dejarán con la boca abierta.
7 - Carreteras asombrosas para los amantes de la conducción:
Todos sabemos que el medio de transporte más rápido es el avión, aunque no siempre tiene por qué ser la mejor opción en nuestros viajes.
En Noruega, el propio trayecto en coche se convierte en uno de los principales alicientes del viaje, y es que los parajes que atraviesa su red de carreteras os hará descubrir lugares con una belleza paisajística de tal magnitud, que os obligarán a parar cada dos por tres.
Si encima te gusta conducir, las vertiginosas carreteras de doble sentido que ascienden zigzagueantes hacia las zonas más altas de los fiordos, los sorprendentes túneles kilométricos y sus puentes colgantes...
...o la sucesión de valles y carreteras de montaña que discurren junto a los singulares fiordos, harán las delicias de todos los amantes de la conducción.
¿Estas 7 razones para viajar a Noruega te han convencido? Pues permanece atento porque dentro de nada comienzo a publicar los artículos sobre mi viaje a Noruega de 2015 con los que podrás organizar un viaje a este país por tu cuenta.
En ellos podrás encontrar desde itinerarios con la ruta y visitas de cada día hasta mapas o un resumen del presupuesto diario.
Si al final te decides a viajar a Noruega estoy convencido de que no te defraudará, y es que a sus espectaculares paisajes hay que sumarle un buen número de pueblos y ciudades pintorescas en las que encontraréis una variada oferta cultural.
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